SANTO DOMINGO. El arzobispo Metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, advirtió ayer que el valor de la familia está fuertemente amenazado por los antivalores que dominan actualmente la sociedad.
Aseguró que el mismo hecho de no valorar el matrimonio significa una pérdida del valor familiar, lo que se traduce en perjuicio de la Humanidad.
“Esa amenaza la constituyen, los Estados y las legislaciones que aprueban leyes contra la familia y a favor de la muerte y contra la vida”, enfatizó en alusión al aborto.
Indicó que los medios de comunicación también tienen su cuota de responsabilidad al difundir múltiples mensajes contra la unidad familiar, la fidelidad y la vida.
A su juicio, los padres deben ser los primeros predicadores de la fe, mediante la palabra y el ejemplo, así como fomentando la vocación de cada uno de sus hijos.
“La familia es el ámbito no sólo de la generación, sino de la acogida de la vida que llega como regalo de Dios, por eso la lucha de la iglesia católica a favor de la vida y contra todo aquello que perturbe la vida, no solamente el aborto”, manifestó.
El prelado católico sostuvo que Dios creó al ser humano por amor, aunque hoy se quiera confundir esa verdad con otros antivalores.
Asimismo, valoró la participación de los abuelos en la formación de la familia, dada su experiencia y por ser una fuente de gran sabiduría.
“La familia es un valor, y necesitamos poner en alto ese valor y cerrarnos a todo lo que está contra la familia, los antivalores, cerrarnos a esa tendencia de tener poquisimos hijos”, destacó. En ese sentido, dijo que la tendencia de hoy día entre los jóvenes es de no tener hijos, y en caso extremo uno o dos: “La familia no puede cerrarse a la vida”, afirmó.
Sostuvo que actualmente el mundo entero libra una lucha entre valores y antivalores, donde se ve crecer más lo negativo, dado que no hay mucho eco de lo positivo.
Ozoria refirió que de acuerdo al Concilio Vaticano II, el sacramento del matrimonio es el signo de la unidad de Cristo y su iglesia, una unión de un hombre y una mujer, la cual se debe preservar en el día de hoy. Recordó que de acuerdo al Papa Benedicto XVI, la familia es un patrimonio de la Humanidad que constituye uno de los tesoros más importante de los pueblos latinoamericanos y del Caribe, que “es como la escuela de fe”.
El arzobispo dictó ayer la conferencia “Transformando el corazón de mi familia”, durante un desayuno organizado por el programa televisivo Siguiendo sus Huellas, de la parroquia El Buen Pastor a propósito de la celebración del Mes de la Familia.
La conferencia tuvo como objetivo moldear los corazones de las familias dominicanas que hoy día se ven afectadas por la falta de comprensión entre sus miembros, y por las influencias externas que las han llevado a adoptar modelos equivocados.
Las palabras de bienvenida estuvieron a cargo de los conductores del programa, Hilda Cid y Benito Acevedo, quienes destacaron el valor de la familia en estos tiempos modernos.
El programa de televisión Siguiendo sus Huellas de la parroquia El Buen Pastor, lleva más de 7 años al aire llevando un mensaje cargado de valores al país y todo el mundo se trasmite por Telesistema canal 11, Televida canal 41 y varias estaciones de radio.
Nota de prensa by www.diariolibre.com